CUIDEMOS LOS INTESTINOS
En la parte cuatro de Functionality Rules, analizamos cómo la salud intestinal se ha convertido en un área de enfoque clave para los alimentos y las bebidas funcionales y qué impulsa este crecimiento.
La salud intestinal es fundamental para el bienestar y esta conciencia ha aumentado en los últimos años. Ahora se sabe que nuestro sistema digestivo afecta nuestra salud en más de un sentido. Y esta salud digestiva depende en gran medida de la dieta, lo que destaca una alimentación saludable con un enfoque en mejorar el microbioma intestinal.
¿Qué opinan los consumidores acerca de esto?
50% conocen el término ‘microbioma intestinal’
Fuente: Chr-Hansen
58% compraron productos con probióticos en el último año
Fuente: FMCG Gurus 2021
53% planea comer o beber más fibra
Fuente: Tate & Lyle
Esta creciente conciencia del consumidor está respaldada por la ciencia. A medida que los investigadores descubren más acerca de nuestro intestino, incluso la forma en la que afecta nuestro cerebro, nuestras emociones, nuestro sueño e incluso la piel, la salud intestinal recibe un enfoque aún mayor en el segmento de alimentos y bebidas funcionales. Pero, ¿qué hace que un producto sea saludable para el intestino?
El biótico dominante
Los probióticos, bacterias vivas y levaduras, han sido el pilar de los productos que promueven la salud digestiva con productos lácteos fermentados y yogures liderando el mercado durante años. Sin embargo, ese liderazgo de mercado ahora se comparte con las bebidas probióticas de origen vegetal: kéfir de agua, jugos prensados en frío, chupitos de hierbas, yogur sin lácteos y, sin olvidar la incorporación más reciente a la lista, la cerveza probiótica.
Alimentar el intestino
Lo que se incluye en una dieta amigable con el intestino se está expandiendo a medida que la investigación destaca ingredientes más allá de lo establecido. Los prebióticos y los posbióticos junto con los simbióticos son las inclusiones más recientes en la lista con el potencial de impulsar el desarrollo de productos. Pero, ¿qué significan realmente estos términos?
Los prebióticos son fibras no digeribles que promueven el crecimiento de bacterias en el intestino. Los prebióticos, que se encuentran en muchas frutas, verduras e incluso granos, pueden ayudar a aumentar el valor nutricional de los alimentos y de las bebidas funcionales utilizando ingredientes naturales y botánicos.
Desde la tradición a la innovación
Lo simbiótico , que es la combinación de prebiótico y probiótico, mejora la salud del intestino al ayudar en la absorción de nutrientes. Las propiedades simbióticas se pueden encontrar en bebidas tradicionales como la kombucha. Y los "bióticos" más nuevos, los posbióticos, son subproductos beneficiosos de los probióticos. Al no requerir condiciones especiales para mantener su eficacia, los posbióticos tienen el potencial de convertirse en la corriente principal. Pero solo el tiempo dirá si eso sucede.
Un factor diferenciador
Es evidente que los beneficios funcionales pueden diferenciar un producto como una opción más saludable. Entre estos beneficios está la fibra agregada que es considerada vital para una dieta saludable y está asociada con múltiples beneficios para la salud, incluso la salud intestinal. Y aquí es donde la solución drinksplus de SIG puede ayudar a diferenciar su producto, incluso los productos que son para llevar, con fibra extra como avena en una bebida para el desayuno o copos de coco en un batido bajo en azúcar. Si quiere conocer más, contáctenos para analizar las posibilidades de desarrollo de producto.
El ámbito de los productos de alimentos y bebidas funcionales se está expandiendo para incluir nuevas áreas, desde el manejo del estrés hasta el cuidado de la piel. Exploraremos estas diferentes situaciones y cómo se satisfacen en la siguiente parte de la serie. Reciba la historia en su bandeja de entrada subscribiéndose a nuestro exclusivo boletín quincenal, Actualización SIGnals.
- junio 02, 2022