Trazando el círculo
Las economías circulares son el camino a seguir. Y esto significa repensar los métodos de fabricación tradicionales. En la segunda parte de Circular Index, exploramos los elementos que permiten el cambio de la producción lineal a la circular.
En nuestro artículo anterior, hablamos de los principios de la economía circular y de su impacto potencial. Aunque muchos fabricantes están priorizando el cambio hacia un modelo circular, trabajar por la sostenibilidad empresarial no es un proyecto en solitario. Es necesario repensar y rediseñar no sólo el producto individual, sino toda la cadena de valor.
Diseñar en forma circular
No hay una solución rápida para convertirse en circular. Requiere volver a la fase de diseño del producto e integrar el elemento de reutilización en todo el proceso. En pocas palabras, si alguna parte del producto sobra después de ser utilizado, tiene que volver a entrar en la economía de una forma u otra. El objetivo del diseño circular es que cada parte del producto esté "hecha para ser rehecha".
Uso colaborativo de los recursos
Todos los productos requieren la creación de recursos y, a su vez, también crean residuos, aunque sean mínimos. Pero con la colaboración, la definición de residuos y materias primas puede intercambiarse. Por ejemplo, Danone. El fabricante utiliza el suero de leche extraído durante la fabricación del yogur griego como recurso para su gama nutricional y tiene planes para incorporarlo aún más, permitiendo la circularidad en su producción al tiempo que ahorra costes.
Asociarse con la naturaleza
Los elementos de la economía circular están interrelacionados y abarcan toda la cadena de suministro. Trabajar en conjunto con la naturaleza requiere un enfoque múltiple que implica apoyar los procesos naturales y dejar espacio para que la naturaleza prospere, desde el uso de materias primas de origen responsable y la consideración de la biodiversidad hasta el uso de energía renovable para la producción y la reutilización del agua durante la fabricación, entre otros.
Una mirada más profunda
Simplificando, la economía circular se identifica con el flujo continuo de materiales en la economía. Pero siempre habrá algún residuo, ya sean productos alimenticios y bebidas o una pieza de automóvil. Entonces, ¿cómo se puede aplicar la economía circular cuando se trabaja con materiales diferentes, por ejemplo, materiales técnicos y de base biológica? El enfoque es diferente. En el caso de los productos compuestos mayoritariamente por materiales técnicos, el objetivo es seguir reutilizando, reparando o refabricando todo lo posible, y lo que quede pasar a la fase de reciclaje al final de la vida útil. En cambio, para los productos fabricados con materiales de base biológica, el objetivo es utilizar fuentes renovables que puedan reincorporarse al ecosistema, eliminando así los residuos.
El siguiente vídeo ilustra este marco mediante un diagrama de sistema de economía circular, también conocido como diagrama de mariposa.
En SIG trabajamos continuamente para conseguir una economía circular, ya sea con nuestro uso de cartón con certificación FSC para todos nuestros envases, o con nuestro compromiso de ser netamente positivos. Es evidente que cada paso es vital en el camino hacia la economía circular, pero ¿qué barreras hay que superar y cómo? No te pierdas nuestra opinión: acompáñanos en la tercera parte de la colección suscribiéndote a SIGnals Update, nuestro exclusivo boletín quincenal. Para saber más sobre la necesidad de un enfoque colaborativo de múltiples partes interesadas para el progreso de la sostenibilidad, descarga este estudio de caso sobre la aplicación de los principios positivos netos al reciclaje de envases de bebidas.
- abril 28, 2022