Soluciones sostenibles para cada necesidad: el envase ideal sí existe
En la industria de alimentos y bebidas, para cada una de las necesidades existe un tamaño ideal. Pensado en cada momento de consumo pero, sobre todo, en lograr la satisfacción total de los clientes y de los consumidores. Para que eso sea posible hace falta invertir en innovación y tecnología. Los envases ideales sí existen, pero tienen que estar diseñados especialmente para un alimento o bebida y una forma de consumo.
Además de asegurar que los alimentos y bebidas lleguen al consumidor en las máximas condiciones de inocuidad e higiene, un envase, en sí mismo, es un vehículo de comunicación de marca, pero también, un facilitador que debe atender la demanda de los consumidores. En SIG, no sólo pensamos en diseñar envases atractivos, también consideramos el tiempo y las formas en las que serán usados.
Imaginemos un envase perfecto para líquidos con un diseño increíble y colores atractivos, pero que al verterlo salga demasiado contenido, se derrame en la dirección equivocada o que no se pueda almacenar una vez abierto. Para solucionar cada uno de esos problemas se requiere de un equipo especializado que sume creatividad, innovación y tecnología.
Tendencias 2023, lo que el consumidor de envases necesita
Entre las necesidades de los consumidores de la industria alimenticia a nivel mundial, está conseguir precios asequibles, pero también un valor añadido en los empaques; la flexibilidad y los sistemas de abasto eco-responsables, son factores que impulsaran la compra. Ello según la consultora de mercado Mintel, en su estudio Tendencias Globales de Envases 2023, expone que el consumidor repensará su presupuesto, por ello los productores de alimentos y bebidas deben usar envases que hagan rendir los presupuestos.
“Los consumidores mirarán a las marcas para ayudarlos a superar las tensiones económicas con productos y envases que se mezclen con las capacidades de compra y que reflejen valor sin compromiso. Ofrecer envases que representen propuestas de valor económico, sin comprometer calidad, conveniencia, frescura, seguridad y responsabilidad ambiental, será un diferenciador durante el 2023 y más allá”, se expone en el documento.
Flexibilidad e innovación, el dúo perfecto en Bag-in-Box
El bag-in-box es ideal para líquidos o productos fluidos. Es un dúo, caja y bolsa, mantiene el aire afuera y ofrece máxima calidad. Lo que ayuda a que el producto esté en mejores condiciones por más tiempo su dispensador es único, pues gracias a su diseño se puede obtener de manera exacta la cantidad de líquido que se desee. Es usado en refrescos, agua mineral, cerveza y leche; pero también para conservar mejor jarabes, huevo líquido, jugos de frutas y hasta vino. Tiene un atractivo extra para las marcas que comercializan líquidos porque es un envase disruptivo con el que fácilmente capturarán las miradas de los consumidores. Además, en términos de inocuidad este envase tiene varias láminas que impiden que el producto se oxide con la luz.
Envases de cartón aséptico para alimentos y bebidas
Aséptico, flexible, seguro y conveniente, así es el envase de cartón que SIG fabrica para sus clientes. Por sus características puede ofrecer hasta 12 meses de vida útil sin refrigeración. Está hecho de materiales renovables que son reciclables en su totalidad, además usan menos combustibles fósiles y su huella de carbono es menor a los envases alternativos. Para bebidas como jugos, lácteos y agua ofrecen la innovación drinksplus, que permite agregar trozos reales de frutas, cereales o perlas de alginato a las bebidas y así diversificar las categorías de consumo.
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- septiembre 12, 2023