Hacer que el tamaño importe

Una visión global  

Después de hablar con representantes de SIG en todo el mundo, encontramos que la demanda de tamaños y formatos está polarizada según las categorías de productos. Además, satisfacer estas demandas con opciones flexibles ha ayudado a los fabricantes en la mayoría de las regiones a retener y aumentar su participación de mercado, especialmente en un momento en el que tanto el poder adquisitivo como los hábitos de consumo se han visto afectados por la pandemia de COVID-19.    

Por qué los tamaños pequeños siguen reinando  

Los envases pequeños han sido muy relevantes por varios años, debido al aumento del consumo “para llevar” y la demanda de productos en porciones individuales. Pero, con un mundo de movilidad limitada y muchos grupos de consumidores confinados en sus hogares, ¿por qué el tamaño pequeño sigue siendo relevante?  

Una de las principales razones es la asequibilidad. El precio juega un papel importante en la prevalencia de los envases de tamaño pequeño en muchos mercados. En regiones como la India, Sudamérica, Europa, Medio Oriente y África, el cambio al tamaño pequeño está impulsado por la necesidad de mantener un producto dentro de un rango de precios asequible. Alcanzar un punto de precio estratégico puede ser el elemento diferenciador para las marcas en la India, por ejemplo, donde un envase de 125 ml recientemente lanzado por SIG ya está demostrando ser popular en el segmento de las bebidas de frutas y los néctares.  

La relación entre las categorías de producto y los volúmenes de envase es un factor ampliamente establecido. Los tamaños de envase más pequeños han sido populares en las categorías de productos listos para beber, como la leche saborizada, los jugos e incluso las bebidas proteicas. Pero ahora las marcas premium de algunas regiones, como el continente americano, ofrecen volúmenes más pequeños en otras categorías, como la leche condensada, las cremas para cocinar e incluso las cremas vegetales, para retener al consumidor consciente de la calidad, pero sensible al precio.  

La percepción del tamaño del envase y el valor asociado también son factores importantes en la popularidad de los envases más pequeños. Por ejemplo, cuando un fabricante de la región del Medio Oriente lanzó recientemente un envase de 150 ml con una diferencia de precio mínima en comparación con su envase de 200 ml, la oferta de 150 ml se convirtió en el tamaño de envase más vendido en esa categoría. La forma de los envases también juega un papel importante en la percepción, y los consumidores de muchas regiones equiparan los envases más altos con más volumen. Por ello, muchos fabricantes ofrecen distintos volúmenes en envases de la misma altura con una diferencia de precio mínima.  

Otros factores que siguen impulsando la tendencia de los tamaños pequeños son la conveniencia y el deseo de evitar el desperdicio de alimentos, especialmente en las regiones donde las familias son pequeñas o hay muchos hogares unipersonales, como en China y Europa Occidental. Los consumidores de la China urbana, por ejemplo, prefieren los envases pequeños tanto para los productos alimenticios como para las bebidas, debido a sus familias poco numerosas y a su ajetreado estilo de vida. 

Cuando grande es mejor 

El aumento de tamaño en ciertas categorías, como en la leche, es una tendencia unificada en la mayoría de los mercados. En algunos de ellos, los jugos también entran en esta tendencia, en ocasiones a costa de los envases individuales, como se puede observar en los mercados de México y Europa.  

Con el aumento de consumo dentro de los hogares, los envases de un litro se volvieron la norma en estas categorías. Los consumidores comenzaron a optar por tamaños más grandes para garantizar la disponibilidad del producto ante la interrupción en las cadenas de suministro. Sin embargo, esta tendencia no parece estar impulsada únicamente por la pandemia, en algunas regiones. 

Flexibilidad para tamaño adecuado 

Es evidente que tanto el precio como la conveniencia juegan un papel vital en la elección de los envases pequeños. Y es probable que esta tendencia se mantenga. Pero aún está por verse si las tendencias sobre el aumento de tamaño también se mantendrán.  

Con la fluctuación de las tendencias de consumo, la flexibilidad y la agilidad se convierten en la clave para captar y retener segmentos de consumidores, a veces en la misma categoría de productos. Anticiparse y satisfacer las necesidades cambiantes de los consumidores ofreciéndoles las opciones adecuadas puede ser un elemento diferenciador que ayude a ganarse la fidelidad a la marca.  

Con los múltiples tamaños de envase, las marcas no necesitan llenar de menos los envases más grandes para asegurar su asequibilidad. En cambio, pueden dirigirse a diferentes segmentos de consumidores simplemente en función del volumen. Tomemos como ejemplo los requisitos del mercado del MEA, donde las bebidas para niños tienden a venir en envases de 125 ml, con los mismos productos disponibles en envases de 200 ml para los adolescentes.  

La amplia gama de volúmenes de envase y las máquinas llenadoras flexibles de SIG permiten a los fabricantes conseguir esta agilidad en sus líneas de producción, ya que pueden llenar hasta nueve volúmenes de envase en una sola máquina, tardando solo unos minutos en cambiar de volumen.  

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